Así están las cosas, tú te peleas por adaptar andadores, bastones, sillas de ruedas, ayudas técnicas para la marcha en general. A ti acuden, como si fueras Cáritas, pidiendo que les des una silla, que si ese andador no les gusta, que si no tendría por ahí otro más nuevo, más mono, más guay.
Pero, cuando les dices que no tienes una ortopedia, sino que eres la fisioterapeuta y que manejas un limitado y viejo "parque móvil" se enfadan. Y, lo que es peor, aparecen con un artilugio que tú no has visto, ni adaptado, ni comentado, ni nada de nada.
Después que si las rueda pincha, que si es estrecha, que si te la cambio por una tuya, que si la abuela fuma...
Es como si creyeran que se las iba a quitar, o que no les voy a dar el visto bueno, o que voy a intentar colar un modelo más caro, o de un "amiguete" del que me llevo comisión. ¡Lo que hay que oir y ver!
Pues ojo, porque si te está estrecha, es mala, pesada, antigua, o lo que sea "Yo no tengo la culpa". Los mismos que te la vendieron son los que tienen que responder. Haberme preguntado antes.
Amén.
ResponderEliminarMadre mía como me suena eso...